domingo, 3 de junio de 2012

Cosas de niños

Cuando era pequeña solía pensar que las personas solo se besaban en la boca cuando se amaban. Sé que parece tonto, pero tenía la firme creencia de que los besos de las películas eran de mentira, me parecía que debería ser demasiado vergonzoso besar a un desconocido, a alguien que no se amaba. Consideraba que los besos eran algo muy especial como para regalárselos a cualquiera a la ligera. Claro que también creía en el ratoncito Pérez y que la gente nunca te haría daño, menos alguien a quien quieres…

Que triste es crecer y que los sueños se rompan, descubrir que la gente miente sólo por conseguir lo que quiere o peor porque no tiene nada mejor que hacer. Comprender que hay personas que harían lo que fueran por conseguir un beso barato y sin dueño, incluso prometer el sol, la luna y un paraíso entero.

Bueno tampoco vamos a ponernos a menospreciar esos besos que son todos iguales porque surgen de una nada que busca un poco de diversión.  Pero es duro ver como el mundo nos golpea fuertemente en la cara cuando nos vamos haciendo mayores destruyendo todas esas ilusiones y esperanzas que nunca deberíamos de perder.

Me gustaría poder seguir viviendo en ese momento donde todo estaba bien y nadie hacía daño, solo cuando te empujaban en el patio y te raspabas las rodillas.


Lo cierto es que no acaba de gustarme como ha quedado porque salió un desvarío algo extraño que no dice lo que quería realmente, pero bueno, supongo que en otra ocasión puedo intentar mejorarlo. 
Jenn..*

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